Huracán

A tropezones va llegando,

surcando los caminos de la vida...

Hace tiempo que el dicho "cada uno recoge lo que siembra"

perdió el poco sentido que le quedaba.
Algo de egoísmo,

pensar más en uno mismo,

la empatía,

eran los ingredientes clave.

Con una jeringuilla inyectar la dosis justa.

La espera es difícil, pero pronto dará su fruto.

Un caramelo deshaciéndose lentamente en la boca,

lo vas haciendo rodar con tu lengua,

pasa por el paladar, por debajo de la lengua,

y la saliva aún es más dulce,

Eso es lo que esperas...

pero a cambio tienes un grano de café,

amargo,

y rueda por la boca,

y tus sentidos no quieren acogerlo,

quieres escupir,

no puedes,

la boca está como cosida,

pero no hay hilo. 

Y el efecto mariposa se activa,

un pequeño aleteo por oriente, y ya tenemos huracán.

Y pasa y va arrasando desahogos 

y con delicadeza va dejando salir pájaros,

vuelan amapolas....

Y va tejiéndose una enredadera de hiedra alrededor del huracán,

verde como la vida más pura,

y lo va elevando hasta las nubes,

insignificantemente con el mas fuerte destello

de la noche mas estrellada,

el insignificante huracán lentamente se va perdiendo.